Primer desazón entre diputados integración de la JUCOPO
Jaqueline Robles
Tarde y entre reclamos que fueron subiendo de tono, se instaló este miércoles la LXV Legislatura y se abrió el Primer Periodo Ordinario de Sesiones, el que advirtió, que éste será un parlamento en el que los temperamentos provocarán intensos debates y mantendrán entretenidos a los medios de comunicación.
Con cerca de dos horas de retraso, la presidenta de la Mesa Directiva, Mariana Benítez Tiburcio, abrió la sesión para atender un solo tema: oficializar la integración de la Junta de Coordinación Política – Jucopo- , a la que todo partido que llega al Congreso aspira a pertenecer, porque es justo ahí donde se toman los grandes acuerdos.
La resolución que la víspera diera el Tribunal Estatal Electoral al Partido Acción Nacional y el del Trabajo, dio paso a la suma de dos fracciones más a la tan anhelada JUCOPO, que en un inicio solo formaban Morena, PRI y PRD.
Empero, un par de inconformes habrían de reclamar lo propio, Eva Diego y Samuel Gurrión Matías, que interrumpieron la sesión para reclamar a Benítez Tiburcio su negativa a formalizar la integración del nuevo Grupo Parlamentario del Partido Verde Ecologista.
No aguanta nada Mariana
“¡Le voy a pedir que guardé silencio, ya le di la palabra, si su declaración es para medios le pido que lo haga en otro momento, lo que le estoy diciendo es que a la presidencia de la Mesa Directiva no llegó la documentación!”
Esas fueron las expresiones que apenas se le escuchaban a la priísta Benítez Tiburcio, molesta por la interrupción y cuestionamiento de Eva Diego y porque el hecho le robó la atención de la prensa. Su enojo e intolerancia fue tal que abandonó el recinto con rapidez al término de la reunión.
La primera alianza entre morenos y rojos se notó con el respaldo que le dieron, para que ignorara a los inconformes y continuara la Sesión.
“Mariana no aguanta nada, es una intolerante”, comentaba un grupo de asistentes parlamentarios.
Entre traidores y mafiosos
Ante la necedad de la dupla verdecologista, la desesperación de Freddy Gil se hizo presente: “¿Para qué quieres hacer fracción con un traidor Eva? ¡Par de mafiosos!”, espetó el ex edil de San Pedro Mixtepec.
La atención de la sala entera se centró en ellos, sobre todo cuando Pineda Gopar levantó de su curul su enorme humanidad y enfrentó a su ex compañero que supo el riesgo que corría. Más de uno quería ver el show completo, ese que los federales saben dar muy bien, con empujones entre ellos.
Al fondo, la mirada divertida de los diputados de Morena al ver cómo se confronta el otrora grupo que mantuvo por años el control del parlamento oaxaqueño.
El hecho no pasó a mayores, solo provocó el abandono de la pareja cuya mayor distinción ha sido su capacidad para saltar de un grupo político a otro.
Más tarde vendría la toma de protesta de la JUCOPO, enmarcada en con las enormes sonrisas de Natividad Díaz y Noé Doroteo Castillejos que al fin tendrán acceso el grupo de negociación que ha dado grandes privilegios.
El arranque oficial de los trabajos de LXV Legislatura dibujó con claridad lo que viene para Oaxaca.
Una oposición priista que pierde fuerza, que se divide y que ya no alcanza nada, ni aún con la suma de otros grupos opositores.
Una fracción morenista que ya aprendió a jugar con el interés del resto y sus ambiciones
Y un Oaxaca que de nueva cuenta, se quede esperando que las y los diputados antepongan a la población a sus interés de grupo.